top of page

Tu caballo tiene artrosis? 8 consejos para ayudarle a lidiar con ello


Cada vez hay más personas concienciadas de que es necesario cuidar bien de sus caballos, y por eso los caballos ahora viven más años y están activos durante más tiempo que antiguamente. Eso no evita que, a partir de cierta edad, tengan problemas de salud, y uno de los más comunes es la osteoartrosis. Como cuidadores de los caballos, en nuestras manos está tomar medidas para que puedan mantenerse activos y lo sobrelleven de la manera más cómoda posible.

4 cosas que debemos hacer:


1) Conocer al enemigo: Es sólo artrosis? Quizá, pero es importante comprender su complejidad y por qué puede ser un reto a la hora de gestionar al caballo. La osteoartrosis es una enfermedad progresiva en las articulaciones del caballo que lleva a dañar el cartílago articular del interior de la articulación, el hueso bajo dicho cartílago y los tejidos blandos de la zona.


Hay muchos factores que pueden causar osteoartrosis y no tiene cura, por lo que una vez se da, el objetivo es aliviar el dolor causado por esta enfermedad, lo cual no es fácil. Cada caballo percibirá el dolor con una intensidad diferente. Algunos aún podrán entrenar y otros no. Pero lo que es común para todos es que las articulaciones afectadas se benefician estando en movimiento y haciendo ejercicio regularmente, siempre que el animal pueda hacerlo sin dar señales de molestias.


2) Sí al ejercicio, pero planificado y a medida del caballo: mantener la masa muscular que envuelve la articulación afectada ayudará a estabilizarla, evitará la laxitud de la articulación y/o una carga anormal del peso, algo que llevaría a compensaciones y otros problemas de salud en el cuerpo. Pero es importante ejercitar al caballo en entornos que promuevan su longevidad y no en lugares que le puedan causar más dolor articular. El ejercicio debe ser diseñado a medida, después de consultar a tu veterinario.


Estas actividades pueden variar desde andar del ramal a un corto y suave paseo montado, pero siempre después de haber realizado un calentamiento previo y un enfriamiento posterior. El caballo debería moverse sin restricciones, con movimientos amplios. Para los caballos con osteoartrosis ir por carreteras asfaltadas no ayudaría, vaya herrado o no. En su lugar es mejor hacer ejercicio en suelos más blandos, como un campo de hierba o una pista de arena bien cuidada. Y hay que evitar terrenos resbaladizos donde el caballo pudiera resbalar o caer.


Además en el caso de algunos caballos con artrosis deberían limitarse a hacer ejercicio en superficies llanas, ya que las cuestas pueden causar más presión en las articulaciones. Los giros repentinos o arranques y paradas en seco tampoco son recomendables para estos caballos. Hacer ejercicio en el agua puede ser de gran ayuda. Si puede nadar, el caballo se puede mover sin tener impacto en las patas. Y hay que tener expectativas razonables, y recordar que la artrosis irá avanzando y el caballo llegará a un punto en el que no podrá hacer según que ejercicios sin sentir molestias. Si la artrosis está muy avanzada, mantenerse en movimiento en un terreno plano será suficiente en un caballo ya mayor.


3) Mantente en