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Fórmulas más naturales para bañar a tu caballo


No hay duda de que a todos nos gusta ver a un caballo limpio y aseado, pero, ¿es el champú o la loción algo realmente bueno para el pelo y la piel de tu caballo?

La piel de un caballo es su órgano más grande. Cuando se trata de aplicar productos cosméticos, ¿sabes realmente cual es el mejor?

Un pelaje fuerte y brillante no sólo les da un buen aspecto sino que es indicativo de su bienestar.

BAÑOS Y BURBUJAS

Menos es más. Algunos propietarios les bañan en exceso, cosa que puede causar caspa por los restos del champú y de acondicionador acumulados. Si usas champú, acláralo bien para eliminar el pelo y la piel muerta. En caso de caballos con la piel seca, caspa o perdida de pelo, intenta bañarlos con una infusión (con agua algo caliente pero no hirviendo) de romero y ortiga. O para un baño sin agua, pulverízale sobre el pelaje una mezcla de bicarbonato con lavanda en polvo, y elimina la suciedad con el cepillado.

Algunos champús comerciales pueden usar petróleo para el brillo y sal para hacer espuma. Estos elementos secan el cabello e irritan la piel. Algunos caballos parecen tener el pelaje menos brillante después de un baño porque los aceites naturales de la piel han sido eliminados.

Sodium Lauryl Sulfate (SLS) y Sodium Laureth Sulfate (SLES) son agentes limpiadores comunes y efectivos. Son el estándar de la industria. No obstante, pueden ser abrasivos y sus efectos deben ser compensados en la fórmula del champú.

Otra opción son los sulfatos verdes (agentes activos de superficie). Combinados con agua, los sulfatos de base vegetal levantan la suciedad para que pueda ser eliminada con el aclarado.

Los sulfatos de base vegetal reducen la espuma pero no el brillo, y puesto que los champús libres de petroquímicos son más suaves con el pelo, ofrecen un extra en eficiencia y economía, requieren menos o ningún consumo de acondicionadores.

PH EN EQUILIBRIO

¿Cuál es el pH neutro de tu caballo? El pH mide la acidez o la alcalinidad en un rango de 0 como muy ácido a 14 como muy alcalino, teniendo en 7 el punto medio neutro. Un pH más bajo o más alto irritará la piel, por ejemplo, el ácido sulfúrico es un pH 1 muy ácido, mientras que un líquido desatascador de tuberías es un pH 14 alcalino muy alto.

Abusar de champús mal equilibrados en pH puede dañar a tu caballo. Lo que se pone en la piel, es absorbido por su sistema, El pH de un caballo sano es entre 7,0 y 7,4. El de un ser humano es entre 6,7 y 6,9. Así que la mayoría de champús de pH neutro, para aclararse de manera más limpia, necesitan un pH ligeramente ácido.

Los productos alcalinos penetran las cutículas/capa exterior del cabello y llegan hasta el córtex (centro) dejando el caballo seco y fácilmente quebradizo. Las soluciones ligeramente ácidas hacen lo opuesto, aplanan la cutícula, haciendo el cabello más brillante y fácil de peinar. Para aumentar el brillo y facilitar el peinado naturalmente, se debe aclarar con vinagre.

El sudor y el polvo elevan el pH a un nivel alcalino, por lo que un pH entre neutro y ligeramente ácido es ideal. Los productos alcalinos pueden dar la sensación que limpian mejor, pero eliminan los aceites naturales y abren las cutículas, dañando el pelo y dando acceso a los hongos y a las bacterias.

El pH del agua también es importante. “El agua blanda crea más espuma, el agua dura crea menos.”

LOCIONES

Si añadimos linimento al agua, el resultado es una loción. Las lociones son una forma refrescante de aclarar el jabón, que ayuda a incrementar la circulación y estimulan la recuperación de músculos doloridos o piernas hinchadas. Una receta casera combina vinagre de manzana con sal, pulverizado con spray en las áreas afectadas como la espalda o las patas, pero para evitar los efectos resecantes de la sal, hay opciones comerciales herbales que no irritan la piel sensible.

Se pueden añadir aceites esenciales o plantas a un champú básico o de origen más natural:

* Aceite de árbol de té (antiséptico natural) añadido a un champú suave

* Eucaliptus (un antiséptico natural)

* Manzanilla añadida al agua del baño (antiséptico y tonificante natural)

Cualquier champú básico o fórmula de loción puede personalizarse añadiendo aceites esenciales o plantas. Es importante recordar que un aceite esencial es una sustancia con una alta concentración que puede resultar peligrosa si se usa sin diluir o directamente en contacto con la piel. Deben usarse en dosis bajas (gotas) y siempre diluido en un aceite, crema o gel base.

Sugerencias para el baño:

Baño calmante y relajante: Puedes añadir al agua hierbas como Lavanda, bálsamo de limón, hojas de romero o flor de saúco.

Baño estimulante/activador de la circulación: Puedes añadir jengibre, cayena, milenrama y eupatoria.

Baños para eliminar hongos: Puedes añadir albahaca, tomillo, myrrha, hidrastis y Thuja o aceite de árbol de té, por mencionar algunos.

Aliviar el dolor muscular/esguinces/torceduras: Puedes añadir árnica, romero, tomillo, menta piperita o hipérico para el dolor nervioso.

Mantener alejadas las plagas: Puedes añadir tagetes, o aceites esenciales de citronela, eucalipto o poleo menta.

Calmar la piel seca/inflamada/con picor: Puedes añadir gel de aloe vera, hierba gallinera o avena (poniendo la avena hidratada en un calcetín y exprimiendo el líquido glutinoso del calcetín al agua del baño).

Baños contra infecciones: Puedes usar hierbas antibacterianas como la equinacea, hidrastis, hierba gallinera, berberis, myrrha o tomillo por mencionar algunas.

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